Si encontrar pareja no es tarea sencilla, recuperarse de una ruptura es más complicado de lo que parece. La teoría de lo que una debe hacer cuando su historia de amor llega a su fin, es sabida por todas, pero ¿Qué sucede a la hora de ponerla en práctica?
Amigos en común, vínculos familiares, dependencia emocional, miedo a la soledad, al cambio, al qué pasará... lejos de ayudarnos se convierten en obstáculos a la hora de rehacer nuestra vida y nos hacen estar ancladas en el pasado.
Cuando se escribe el punto final a una relación, se establece un "período de luto". Cada cual lo lleva como sabe, quiere o puede. Hay quien llora como una magdalena, quien se desmelena en busca de nuevos sustitutos, quien enloquece y decide deshacerse de todo lo que le recuerda a él, en fin... ¡Qué fácil sería poder borrarlo de nuestra cabeza! ¿Verdad? Lástima que la realidad no nos permita enviar a todos nuestros Ex a un lugar muy lejano...
Sin embargo, ¿Qué sucede cuando una no puede dejar de pensar en su ex pareja? Si eres de las que lo ha intentado dejar mil veces pero siempre vuelve, quien sigue insistiendo a pesar de saber que no funciona y acude cada vez que oye su llamada ¡Stop! Es momento de poner freno a esta adicción ¿Cómo? Sigue atenta.
A continuación, te facilitamos algunos indicadores que delatan tu adicción a tu ex pareja:
- No puedes evitar preguntar a sus amigos por él.
- Sigues acosándole por teléfono.
- No sólo te resulta imposible eliminarlo de las redes sociales, además cotilleas todas sus fotos y sigues cada uno de sus pasos.
- Aun no has cambiado tu estado en el Facebook y sigues poniendo eso de: "en una relación con..."
- Provocas situaciones para encontrarte con él y frecuentas los mismos sitios por si lo ves.
- Sigues manteniendo el contacto con su familia.
- Cada vez que suena tu teléfono ansías que sea él
A continuación, no te pierdas la siguiente galería en la que desvelamos los pasos para desengancharte:
Imagen: Salvatore Ferragamo
0 comentarios:
Publicar un comentario